Comienza friendo medio pimiento rojo en tiras hasta que estén tiernas y ligeramente doradas. Retíralas y reserva.

En la misma sartén, fríe una cabeza de ajos entera hasta que estén dorados y fragantes. Retira y reserva junto con el pimiento rojo.

En la misma sartén, dora el conejo troceado hasta que esté dorado por todos lados. Retira y reserva.

En una olla, hierve los caracoles durante 45 minutos hasta que estén tiernos y cocidos. Una vez listos, añade el conejo y la cabeza de ajos reservados, y cocina durante 15 minutos más para que los sabores se integren.

Mientras tanto, en la misma sartén donde has frito todo, agrega medio pimiento verde y media cabeza de ajo picado finamente, y cocina hasta que se ablanden y adquieran un delicioso tono caramelizado. Luego, incorpora 2 tomates pequeños rallados y continúa cocinando hasta que se deshagan y desarrollen un color más profundo y concentrado.

Agrega el arroz y dóralo durante aproximadamente 4 minutos, revolviendo constantemente para que se impregne de los sabores.

Transfiere el agua de cocción de los caracoles con el conejo a la paellera. Añade el arroz dorado, la cabeza de ajos en el centro y los pimientos rojos fritos. Para calcular el agua, yo siempre hago 2.5 veces el volumen del arroz. Es decir, si ponemos un vaso de arroz, pongo 2.5 vasos de agua.

Algunas veces le añado coliflor y trozos de alcachofa si es la temporada.

Después de un tiempo de cocción, agrega 2 ramas de romero cuando falten aproximadamente 5 minutos para que el arroz esté listo.

Una vez que el arroz esté cocido y haya absorbido todo el líquido, retira la paellera del fuego y déjala reposar durante 5 minutos antes de servir.

¡Disfruta de esta deliciosa paella llena de sabores mediterráneos!